¿Qué hacer cuando la ropa blanca ya no es tan blanca? ¿Hay alguna forma de volver a la normalidad sin tener que comprar nueva? La respuesta es sí. Aquí hay algunas maneras sencillas de blanquear la ropa amarilla para que vuelva a lucir como nueva.
Pasos Previos
Antes de comenzar con cualquier método de blanqueamiento, es necesario prestar atención a algunas cosas previas.
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Lavar la prenda separadamente. Esto es importante para evitar que las prendas más claras se manchen con otras más oscuras.
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Leer la etiqueta. Si la prenda no está hecha de algodón blanco 100%, entonces el procedimiento de blanqueamiento puede ser diferente.
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Verificar si la prenda está desgastada. Algunos tejidos se desgastan con los procesos químicos, por lo que es mejor probar un pequeño pedazo antes de pasar a la acción.
Métodos Naturales
Una forma natural de blanquear la ropa es con la luz del sol. Para ello, simplemente coloca tu ropa blanca amarillenta en el patio trasero y déjala expuesta al sol durante todo el día. La luz UV ayudará a eliminar el amarillo y restaurar la tonalidad original.
Otra opción natural es usar vinagre. Mezcla media taza de vinagre blanco y media taza de agua. Luego, sumerge la prenda en la solución durante unos minutos. Finalmente, lava la prenda normalmente. El vinagre actuará como blanqueador suave.
Métodos Químicos
Si los métodos naturales no son suficientes, entonces tal vez sea el momento de probar algo más fuerte. El bicarbonato de sodio es un blanqueador suave que se puede usar para blanquear la ropa. Mezcle una taza de bicarbonato de sodio con un litro de agua caliente y sumerja la prenda durante 15 minutos. Luego, lávela normalmente.
Para un blanqueador más fuerte, prueba el cloro. Mezcle una taza de blanqueador para lavandería con un litro de agua caliente y sumerja la prenda durante 30 minutos. Luego, lávela normalmente. Asegúrate de usar guantes protectores.
Consejos para Prevenir el Amanecer de la Ropa
La mejor manera de mantener la ropa blanca es prevenir que se vuelva amarilla. Para ello, sigue algunos consejos simples:
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Lava la ropa correctamente. Usa un detergente suave y tibia.
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No mezcles colores. Separa la ropa blanca de la oscura para prevenir la transferencia de color.
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Agrega un blanqueador suave. Un blanqueador suave ayuda a prevenir que los pigmentos se adhieran a la prenda.
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Seca la ropa al aire libre. La luz solar ayuda a mantener la ropa blanca.
Ahora ya sabes cómo blanquear la ropa blanca que está amarilla. Para obtener los mejores resultados, utiliza el método adecuado para tu tejido y sigue los consejos para prevenir que vuelva a mancharse. ¡Vuelve a lucir como nuevo!